Todos tenemos una rutina en mayor o menor medida, de echo muchos incluso la necesitamos, llegamos casi a depender de ella, creemos que así tenemos nuestra vida más controlada, y por consiguiente, algo así como más a nuestra manera. Eso nos aporta seguridad y una cierta satisfacción para afrontar el día a día y supuestamente...mejorar (o eso creemos)
Estamos atados a trabajos, incluso sustancias, alimentos, compromisos sociales...y a veces incluso increíble e incomprensiblemente nos da miedo salirnos mínimamente de ellas, y no por las consecuencias monetarias, laborales, de salud, nooooooooo, o ni tan si quiera personales de "me gusta o no me gusta o quiero seguir mi sueño", NADA DE ESO..., es mucho peor, ya que es única y exclusivamente por el puto y subnormal echo del qué dirán.
No hay una razón más estúpida, irracional, incoherente, infantil y más de borregos que esa. A veces inconsciente y otras a caso hecho, no escuchamos nuestro yo interior, y reprimimos nuestros sentimientos y nuestra opinión porque sencillamente somos gilipollas. Es tan poco común escuchar a alguien ser él mismo, que cuando lo escuchamos, nos parece raro...fuera de lugar y como que algo no anda bien, cuando probablemente el que no anda bien es el resto de gente que lo rodean.
Be yourself, no matter what they say
1 comentario:
toda la razon en lo que cuentas...
encantada de leerte.....
Un abrazo...¡¡¡
Déjame que te cuente
www.dejamequetecuente.net
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